EL PAÍS DEL CHOCOLATE
Existió una vez un país
donde todo era muy dulce, las cosas estaban hechas con chocolate de almendras,
sus calles bañadas en chocolate con leche, que cada vez que llovía cambiaban al
sabor del chocolate blanco, ya que las nubes eran de cacao y la lluvia que caía
eran pepitas de chocolate.
En medio del pueblo había
un gran árbol llamado cacaotero que daba unos ricos frutos cuyo nombre era
semillas de cacao.
Allí iban todos los días
los habitantes del país a recoger sus semillas para preparar todo tipo de comidas.
Si molían el cacao, lo
echaban a la leche para darle color y sabor.
Si lo cuajaban, se ponía duro
y lo comían a trocitos.
Lo hacían crema para
rellenar galletas, bollos y magdalenas.
Echándolo a la masa del
bizcocho lo convertían en un rico pastel de chocolate.
Y cuando llegaba el
verano y querían comer algo fresquito, lo metían al congelador y saboreaban
buen helado de chocolate.
¡¡¡Cuántas cosas ricas hacían con su árbol
cacaotero y el fruto que de él salía, el cacao!!!
En el país del chocolate
así de felices vivían, porque con su árbol cacaotero el cacao en chocolate
convertían.
Y colorín colorado… ¿A
quién le gusta el chocolate?
AUTORES: Adrián y su familia.
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